sábado, junio 05, 2004

El muerto gozoso

En una tierra fértil, llena de caracoles,
quiero cavar yo mismo una fosa profunda,
donde pueda a mis anchas tender mis viejos huesos
y dormir en el olvido cual tiburón en las olas.

Odio los testamentos y odio las sepulturas;
antes de implorar una lágrima a nadie,
preferiría, vivo, invitar a los cuervos
a ensangrentar sus picos en mi inmundo esqueleto.

¡Oh gusanos!, oscuros compañeros sin oídos ni ojos,
ved que viene a vosotros un muerto libre y gozoso;
vividores filósofos, hijos de la putrefacción,

pasad sin remordimientos a través de mi ruina,
y decidme si queda aún una tortura
¡para este viejo cuerpo sin alma y muerto entre los muertos!

Charles Baudelaire (Las flores del mal)